Realmente no existe un césped artificial que no queme los días calurosos y soleados de verano.
Algunos modelo consiguen reducir la temperatura algunos grados, gracias al diseño de su fibra
consigue refrigerar un poco la temperatura, pero no será un cambio muy sustancial.
Otra opción para refrigerar el césped es usar un relleno de corcho, con esto si consigues una
reducción drástica de la temperatura pero tendrás algunos inconvenientes con este tipo de relleno
que no es muy estable, ademas de ser un poco sucio y en caso de lluvia fuerte puede llegar a
flotar y desplazarse.